.......por las que no creo más en los Derechos Humanos
Si bien es cierto es estos momentos llevo la cátedra de pre- grado “derechos Humanos” en la cual en un principio me alentaba, emocionaba y de hecho me inspiraba para especializarme en ella. La visión integradora, esperanzadora que tenía de la misma a llegado a un punto de estar desvaneciéndose en mi conciencia e interés, no es por el hecho que no considere que sean inspirados por posibles sentimientos nobles o buenas intensiones; pero, como todo en este mundo lleno de injusticias e impunidades este esfuerzo ha sido a mi punto de vista menguado en sus fines, posiblemente desde la etapa en que fue gestado tal compromiso y concepto.
En primer lugar, considero que es un poco ilógico el hecho que se le atribuyan tantas responsabilidades a un Estado ya desfasado y con poca credibilidad por el hecho de ser el mismo su propio juez y parte sobre violaciones a sus mismos miembros constituyentes, es tan absurdo como pensar que un ser humano corrupto y lleno de perversidades acostumbrado a las opciones perniciosas de la vida pueda llegar al punto de auto juzgarse y peor aun a flagelarse por tales conductas, hablando en términos de analogías.
Ahora en el aspecto internacional, ¿quién es el agente que juzga, castiga, opina o monitorea acciones en relación a los derechos humanos?, ¿los mismos Estados?
En la realidad es un hecho que la estructura internacional está delimitada y muy bien jerarquizada, es decir las opiniones de unos países influyen y hasta cierto punto valen más que quizá opiniones más sensatas, Los Derechos Humanos son tan ambiguos que hasta la fecha no hay alguna estructura jurídica con la suficiente potestad de hacerlos cumplir, será por que muchas naciones poderosas no lo permiten los mismos Estados pequeños agresores lo desvalorizan por razones que deben verse más allá de sus fronteras no sólo en el ámbito de lo difícil y poco conveniente de auto-condenarse sino de intereses endogenos que no sólo lo condicionan sino colaboran en muchas esferas económicas, políticas entre otras.
Es bastante triste ver que a lo largo del tiempo millones de personas han perdido la vida por creencias tan honrosas que al final no sirven de nada por que la justicia sólo es aplicable a unos cuantos, porque por lo visto el estilo de vida moderno consiste en aprovecharse y establecer condiciones poco humanas para poder subsistir con estilos de vida onerosos. Aunándose a todo lo anterior los Derechos Humanos tienen tantas contradicciones como la misma vida y sus mismos creadores (ser humano que emana dilemas y contrariedades) …. Hasta que punto llega la responsabilidad, la permisibilidad el derecho de los Estados a ejercer “fuerza” sobre sus súbditos…hasta que punto establecer la diferencia de la anterior con el término de “violencia” ¿ quien lo establece? Quien lo condena? Quien lo impide? Quien lo permite? Es por eso que jamás obtenemos respuestas absolutas en nuestras clases de un poco más de 50 minutos el tema es tan complejo, tan hipócrita tan poco práctico a la ejecución en la realidad que demás esta romperse la cabeza en quien tiene la culpa, la razón quien es la victima y el agresor?
Entre otras dudas, me pregunto quien responde a la población (que al final siempre es la victima en todo sentido) de los destrozos de las guerras? Si es prácticamente una lucha entre el Estado contra la población por razones parecidas a la violación de los derechos humanos, si el fin principal de una guerra es cometer actos de violencia a fin de doblegar y hasta eliminar enemigos del mismo Estado agresor…quien defiende en forma concisa a la población inocente, por lo visto el concepto de derechos humanos desaparece temporalmente y sólo se hace referencia a este por parte de actores poco importantes porque su voz no hace eco y agentes ajenos a dichas realidades es decir observadores extranjeros que desprenden hipocresía pues a lo largo de su historia llena de prestigio y falacioso éxito en el campo de los Derechos humanos han cuidado a sus ciudadanos pero han violado derechos de otros un ejemplo claro es la intromisión y opiniones aportadas por estados Unidos en la época de Carter el estandarte de los derechos humanos cuando su mismo Gobierno colaboraba con el ejercito salvadoreño a diezmar miles de salvadoreños en una de las guerras más crueles y sin resultados concretos palpables(más que muertes y mayor nivel de impunidad que nunca) lo mismo ocurrió con Guatemala en el mismo período otorgándole reconocimiento a dicho Gobierno de preocuparse por velar para que se cumplan los Derechos humanos cuando flagelaban, linchaban a luz pública como muestra de una gran doble-moral, lo más risible es la condena a la Libia de Gaddafi por sus grandes injusticias y su “terrorismo internacional”.
Estas son algunas de mis razones de ya no creer en los derechos humanos por ser otro instrumento viciado para lavar las manos del Estado.
Si bien es cierto es estos momentos llevo la cátedra de pre- grado “derechos Humanos” en la cual en un principio me alentaba, emocionaba y de hecho me inspiraba para especializarme en ella. La visión integradora, esperanzadora que tenía de la misma a llegado a un punto de estar desvaneciéndose en mi conciencia e interés, no es por el hecho que no considere que sean inspirados por posibles sentimientos nobles o buenas intensiones; pero, como todo en este mundo lleno de injusticias e impunidades este esfuerzo ha sido a mi punto de vista menguado en sus fines, posiblemente desde la etapa en que fue gestado tal compromiso y concepto.
En primer lugar, considero que es un poco ilógico el hecho que se le atribuyan tantas responsabilidades a un Estado ya desfasado y con poca credibilidad por el hecho de ser el mismo su propio juez y parte sobre violaciones a sus mismos miembros constituyentes, es tan absurdo como pensar que un ser humano corrupto y lleno de perversidades acostumbrado a las opciones perniciosas de la vida pueda llegar al punto de auto juzgarse y peor aun a flagelarse por tales conductas, hablando en términos de analogías.
Ahora en el aspecto internacional, ¿quién es el agente que juzga, castiga, opina o monitorea acciones en relación a los derechos humanos?, ¿los mismos Estados?
En la realidad es un hecho que la estructura internacional está delimitada y muy bien jerarquizada, es decir las opiniones de unos países influyen y hasta cierto punto valen más que quizá opiniones más sensatas, Los Derechos Humanos son tan ambiguos que hasta la fecha no hay alguna estructura jurídica con la suficiente potestad de hacerlos cumplir, será por que muchas naciones poderosas no lo permiten los mismos Estados pequeños agresores lo desvalorizan por razones que deben verse más allá de sus fronteras no sólo en el ámbito de lo difícil y poco conveniente de auto-condenarse sino de intereses endogenos que no sólo lo condicionan sino colaboran en muchas esferas económicas, políticas entre otras.
Es bastante triste ver que a lo largo del tiempo millones de personas han perdido la vida por creencias tan honrosas que al final no sirven de nada por que la justicia sólo es aplicable a unos cuantos, porque por lo visto el estilo de vida moderno consiste en aprovecharse y establecer condiciones poco humanas para poder subsistir con estilos de vida onerosos. Aunándose a todo lo anterior los Derechos Humanos tienen tantas contradicciones como la misma vida y sus mismos creadores (ser humano que emana dilemas y contrariedades) …. Hasta que punto llega la responsabilidad, la permisibilidad el derecho de los Estados a ejercer “fuerza” sobre sus súbditos…hasta que punto establecer la diferencia de la anterior con el término de “violencia” ¿ quien lo establece? Quien lo condena? Quien lo impide? Quien lo permite? Es por eso que jamás obtenemos respuestas absolutas en nuestras clases de un poco más de 50 minutos el tema es tan complejo, tan hipócrita tan poco práctico a la ejecución en la realidad que demás esta romperse la cabeza en quien tiene la culpa, la razón quien es la victima y el agresor?
Entre otras dudas, me pregunto quien responde a la población (que al final siempre es la victima en todo sentido) de los destrozos de las guerras? Si es prácticamente una lucha entre el Estado contra la población por razones parecidas a la violación de los derechos humanos, si el fin principal de una guerra es cometer actos de violencia a fin de doblegar y hasta eliminar enemigos del mismo Estado agresor…quien defiende en forma concisa a la población inocente, por lo visto el concepto de derechos humanos desaparece temporalmente y sólo se hace referencia a este por parte de actores poco importantes porque su voz no hace eco y agentes ajenos a dichas realidades es decir observadores extranjeros que desprenden hipocresía pues a lo largo de su historia llena de prestigio y falacioso éxito en el campo de los Derechos humanos han cuidado a sus ciudadanos pero han violado derechos de otros un ejemplo claro es la intromisión y opiniones aportadas por estados Unidos en la época de Carter el estandarte de los derechos humanos cuando su mismo Gobierno colaboraba con el ejercito salvadoreño a diezmar miles de salvadoreños en una de las guerras más crueles y sin resultados concretos palpables(más que muertes y mayor nivel de impunidad que nunca) lo mismo ocurrió con Guatemala en el mismo período otorgándole reconocimiento a dicho Gobierno de preocuparse por velar para que se cumplan los Derechos humanos cuando flagelaban, linchaban a luz pública como muestra de una gran doble-moral, lo más risible es la condena a la Libia de Gaddafi por sus grandes injusticias y su “terrorismo internacional”.
Estas son algunas de mis razones de ya no creer en los derechos humanos por ser otro instrumento viciado para lavar las manos del Estado.
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